La clave, según ha explicado Russ Dallen, socio y manager de Caracas Capital a este periódico, es que Dinosaur sólo hizo de intermediario, con un dinero que no era suyo -sino de Goldman- para comprar los bonos al banco central de Venezuela, que era quien tenía los bonos. Así, lo que era una venta directa quedaba formalmente como una operación en el mercado secundario.
http://www.elmundo.es/economia/2017/06/01/592f1a6e268e3ef5238b479e.html